«El Pole Dance es mucho más que un deporte, es un arte».

 

Hace cuatro años, que se encaramó en una barra y sintió la libertad. No solo no ha bajado, sino que ha emprendido su negocio. Warm Up ofrece clases de “pole dance” en una nave industrial de Sabadell

 

¿Qué es el pole dance?

 

Es una disciplina que, muchos años atrás, se llevaba a cabo en los clubs nocturnos y estaba muy mal vista. Ahora es mucho más que un deporte, es un arte.

 

Bailar en la barra es soltarse, ser libre, coger el palo y ser tú misma. Lo sacas todo, liberas la energía negativa de los momentos en los que te encuentras peor. Y es una práctica que requiere mucha fuerza, mucho entrenamiento y tener el cuerpo relajado cuando haces un ejercicio.

 

¿Por qué el pole dance es un arte y no un deporte?

 

No lo veo como un deporte, aunque se haga esta relación porque hay esfuerzo físico, te estás cansando, haces mucha fuerza, abdominales, piernas…. Por eso la gente cree que lo es. Pero para mí es un arte, como la danza.

 

¿Cómo fuiste a parar al mundo del pole dance?

 

Siempre me ha gustado mucho bailar, es una de las cosas en las que puedo ser yo misma. Ahora bien, me obligó a una amiga a probarlo, porque yo lo quería. Estuvo dos años detrás de mí, hasta que le di una oportunidad y me gustó mucho, hace unos cuatro años. Ella no se apuntó, pero yo sí. Y ya me he quedado hasta ahora.

 

¿En qué momento decides emprender un negocio, con tan solo 31 años?

 

Hacía de instructora en unas instalaciones y durante el confinamiento vivimos un momento muy crítico. Hubo muchas bajas, de gente que no quería seguir. Entonces me planteé si seguía o daba un gran paso y me arriesgaba. Siempre he pensado que quería trabajar por mí misma, que montaría mi empresa. Y busqué una nave, para intentar hacerlo es grande y buscar una salida. Abrimos y ha ido muy bien, incluso nos hemos sorprendido. Pensábamos que a la gente le costaría más venir, pero no. Algunos vienen muchas horas, hay gente que se pasa todo el día aquí. Y yo súper contenta.

Warm Up United es mucho más que las clases de pole dance.

Dentro de Warm Up United están las clases de pole dance. Pero, además, también hacemos terapias naturales, quiromasajes y tenemos una colección de ropa deportiva.

 

¿El pole dance se ha podido desamparar de este componente erótico de los inicios?

 

No, la gente todavía piensa muy mal del pole dance. Creen que, para que te dediques, irás a cualquier sala a bailar, ya quitarte la ropa. Nada tiene que ver, es muy diferente a eso. Sí que hay disciplinas, como el extremo exótico pole, en el que se baila con tacones. Pero son también disciplinas deportivas en las que haces el mismo esfuerzo.

 

¿Por qué estos deportes funcionales, como el “crossfit”, ganan terreno en los gimnasios?

 

Desde mi punto de vista, es por la comunidad que se realiza. Como una familia que te apoya. Todo el mundo se ayuda entre todos, las mismas personas entrenan juntas, haces un combo y todo el mundo se para a mirarte, a aplaudirte. Si no te sale, te animan. Te hacen sentir como si no hubiera nada que no pudieras hacer. Quizás este sector guanta terreno porque en el gimnasio estás más solo, haces tu rutina y no te motivas tanto.

 

¿Cuesta atraer a los hombres?

 

Cuesta mucho, porque todavía creen que es de chica. Pero para mí, incluso, se les da mejor a ellos, porque tienen mucha más fuerza y ​​nada les sale. Quizás lo que peor llevan los hombres es el dolor de la piel cuando frotan la barra. La piel quema y hace pellizcos y salen los azules. Pero muchísimos chicos, incluso en muchos programas de televisión, lo hacen. Y lo hacen muy bien. A mí me encantaría que vinieran más chicos y que se animaran, porque les gustaría mucho.

 

Desarrollas mucha fuerza.

 

Le queda el cuerpo muy definido, muy fuerte. Ahora bien, la gente piensa que te vas a convertir en el Hult, y no. Siempre trabajas con tu peso, con la misma fuerza, no aumentas. No crece el músculo.

 

¿Qué habilidades necesitas?

 

Nada…. Solo tener muchas ganas de aprender y sacar energía, esforzarte y constancia, como en todo deporte. Es bastante de voluntad, independientemente de la edad. Mi madre también hace pole dance, puede venir todo el que quiera.